lunes, 16 de agosto de 2010

68 - NOSFERATU, EL VAMPIRO (Nosferatu, eine Symphonie des Grauens). F.W. Murnau. Alemania, 1922.

Entre las más que numerosas versiones que se han llevado a cabo de la novela de Bram Stoker, Drácula, estamos ante la primera y, posiblemente, la que mayor influencia ha tenido en el resto de posteriores producciones.

El cambio de nombre del vampiro a Nosferatu vino provocado por un problema de derechos de adaptación con los herederos de Stoker quienes, al final, se vieron más que recompensados con las consecuentes películas centradas en el vampiro por excelencia, y por la cantidad de derechos que éstas les reportaron.

Rodada bajo el más puro estilo del expresionismo alemán, las luces y sombras cobran más importancia aquí que nunca y son la herramienta fundamental de la que se vale el director alemán para provocar miedo e, incluso, horror.

Aunque no deja de tener también su importancia la interpretación de Max Schreck, el actor que da vida al conde Orlock (como aquí llamaron al vampiro) y cuya presentación de imagen se ha quedado grabada en el consciente colectivo. De hecho, su calva, su apariencia blanca mortal y sus uñas con garras han sido elementos que se han utilizado en posteriores producciones como Nosferatu, vampiro de la noche (de próxima aparición en el blog); La sombra del vampiro (E. Elias Merhige, 2000), en la que Willem Dafoe se presentaba como si fuera el heredero de Schreck; e, incluso, en Drácula, de Bram Stoker (Francis Ford Coppola, 1992), en la que Gary Oldman se veía adornado con el mismo moño que en esta versión lo fuera el actor de cine mudo.

También ha trascendido este título en cuanto a las creencias populares sobre los vampiros. Aquí se cuenta que deben dormir en ataúdes rellenos de la tierra maldita donde les enterraron, por ejemplo, comenzando así el largo, continuo y actual debate sobre lo que se puede utilizar o no contra los chupasangres.

A estas alturas de curso, y con todos los avances tecnológicos por medio, difícil será que os asustéis viendo este título. Pero no hay nada como conocer los orígenes para valorar mejor los posteriores logros.

1 comentario:

  1. Coincido con que es una de las 1001 peliculas que hay que ver. La nueva versión con sonido también esta buena

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