Otra de las hijas del año 39, La diligencia está considerada de forma unánime la madre del western moderno. Y con razón. A lo largo de la década de los 30, las películas de vaqueros habían caído en picado y los estudios habían perdido el interés en ellas.
De hecho, he de confesar que John Ford, el hacedor de esta obra, es el director de cine que más me ha sorprendido nunca con su producción. Partiendo del respeto que dan los grandes nombres, lo que he gozado con algunos de sus títulos no está escrito.
Sin embargo, Ford había encontrado una nueva fórmula que, el tiempo lo ha demostrado así, sería copiada ad infinitum por numerosos directores. Entre las novedades (que son muchas), se encuentra una narrativa de una sencillez y eficacia pasmosas.
Al fin y al cabo, estamos ante la historia de un viaje en diligencia por el viejo Oeste. Los pasajeros representan, cada uno, a un estrato de la sociedad aunque, según el modelo más fordiano, son precisamente los representantes de las clases más dudosas los que tienen un mayor y complejo esquema de valores.
Como protagonistas, John Wayne por fin encontró el pesonaje que le convertiría en estrella durante los siguientes treinta años. Claire Trevor, la chica, también se vería favorecida por el tremendo éxito de este título. Y el entrañable Thomas Mitchell disfrutaría de un año glorioso al haber dado vida también al padre de Escarlata O'Hara.
Otras novedades fueron que, por primera vez, Ford rodó en el ahora mítico Monument Valley y que, también por primera vez, el 7º de Caballería (que daría nombre incluso a un programa musical de TVE conducido por Miguel Bosé) salvaría la situación apareciendo al final para salvar a los buenos.
Parecerá mentira pero, en su momento, fueron muchos los productores que sufrieron por causa de esta película. Y es que al director le costó un gran esfuerzo encontrar estudio que le financiara su proyecto. Es que los hay que no tienen ojo.
Para mí, el visionado de esta joya supuso mi entrada en este género. Acostumbrado desde pequeño a que no me interesaran las historias del far west, lo que gocé con La diligencia fue mi primer paso hacia un género que, hoy en día, me sigue haciendo disfrutar. De vez en cuando.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario